El fenómeno de las personas desaparecidas cada vez sigue creciendo en el país, pero muchos son los casos en los que algunas personas, e incluso menores de edad deciden asentarse de sus casas de manera voluntaria y la mayoría de veces por motivos personales o diferencias con sus familias.
Tal es el caso de una menor de 14 años que en días pasados fue reportada como desaparecida en Los Molinos, Zapopan.
La Fiscalía de Personas Desaparecidas la encontró sana y salva con unis vecinos de la zona y la menor dijo que huyó por problemas familiares.
Otro caso muy mediático fue el de la joven trans Mónica, que en abril fue reportada como desaparecida y su familia hizo una gran campaña en redes sociales y varias marchas en la ciudad, para que al final la fiscalía la localizar en buen estado de salud y ella confirmara que se ausentó por voluntad propia.
En 2019 ya se había presentado un caso similar con Mónica, dónde también decidió irse de su casa y su familia la reportó como desaparecida.
Muchos han sido los casos en los últimos meses en los que personas, principalmente jóvenes, deciden salir de su núcleo familiar por decisión propia y preocupan a la ciudadanía y sus familias.
Autoridades realizan los protocolos correspondientes y en ocasiones resulta ser que los desaparecidos decidieron ausentarse por voluntad propia.
Es importante hablar con nuestras familias y hacerles saber los problemas o diferencias para no deslegitimizar los casos y no caer en cuentos como el de la joven Ana Michelle y su novio, quienes inventaron una supuesta privación de la libertad por andar en acciones ilegales y viciaron los casos de desaparición a nivel nacional para luego narrar muy sonrientes una historia poco creíble.